sábado, 2 de julio de 2011


Ahora que todo se va acabando, que me doy cuenta de que, probablemente nunca me he enterado de nada, que me miro en el espejo y sólo veo a un idiota... tendría que haber cerrado este blog hace mucho tiempo, haber abierto otro, acabar la novela, empezar otra, dejarme de todas estos pensamientos distorsionados. Veintiocho entradas más y cerraré el blog. Lo hundiré en el mar como si no hubiera existido jamás.

Creo que hasta aquí he llegado. No sé cómo ni cuándo, ni hasta dónde ni por cuánto tiempo. Cumpliré, por fin, lo que el título del blog prometía.

Creo que estos tres años y medio sólo han sido una tregua, un tiempo extra que me he dado para comprobar si era posible que algo cambiara.

Nada cambia si uno no cambia.

Y yo no cambio. Sigo haciendo infeliz a todo el que se me acerca.

Es tiempo de desaparecer.

8 comentarios:

Daltvila dijo...

Muy buenas:
Acabo de venir de cenar con unos amigos en un japonés y como desde hace una semana ando enganchada a esto de los blogs, al llegar a casa, he encendido el ordenador y me he llevado esta ingrata sorpresa.
No te conozco. No sé apenas nada de tí, tan solo lo que he leido tuyo. Perdoname si me cuelo en tu vida. No me creo con derecho a opinar y sé que dicen que los consejos no hay que darlos ni aunque te los pidan pero...
Dado que pareces decidido a ponerle fin a tu blog y me da auténtica pena porque me has caído bien, quiero decirte que me encanta tu modo de escribir, tu modo de conectar es asombroso, tu forma de transmitir sentimientos, tu sentido del humor maravilloso y que tanto bien te hace. Hazme un favor: ignora a quienes te hayan dicho en la vida que eras un graciosillo...ENVIDIA...y SOLO ENVIDIA, probablemente eran de ese tipo de personas que nunca pillan la gracia a nada (signo de poca inteligencia).
Empieza a creer en ti y deja de lamentarte y acaba de una puñetera vez tu novela que estoy deseando leerla.

hécuba dijo...

No desaparezcas, toni. Por favor.

Anónimo dijo...

Te lo decimos todo el mundo, BANDINI, no te vayas. La blogoesfera perderá a un escritor como tú y la morralla que hay por doquier en el mundo blogoesférico, al irte, se afianzará incluso más en ello.

Muy pocos blogs valen la pena, el tuyo está en el top, para mí, de los que sí valen la pena. Llámame elitista de las letras o lo que quieras, pero blogs como el tuyo hay muy pocos.

Please don't go... Escribe esa novela o acábala y empieza otra, sigue trabajando por el bien de la humanidad: ya sabes haciendo el ORO AZUL accesible a todos, y sobre todo, a quien más lo necesite.
Por favor, no pierdas el norte por dejar blogger, que si no,
también nosotros lo perderemos. Perderemos al discípulo
de Pedro Salinas. ¡Cómo me gusta este apellido y lo que
implica!

Y recuerda, si me necesitas silba, que para eso estamos los amigos de verdad.

Vayan mis disculpas anticipadas por la EXTENSIÓN de este comentario, pero necesitaba comunicar contigo y puede que sea ésta manera de comunicar la que me hace más humana, no se otra. Para mi escribir y las letras es tan importante como el aire que respiro.

Un abrazo,

Ámber

Espera a la primavera, B... dijo...

DaltVila: bueno, quien me llamó graciosillo fue el director de l´escola d´escriptura de l´Ateneu Barcelonès... algo debería hacerle caso, aunque sólo sea por su experiencia como lector profesional...

En cuanto a hacer daño a la gente que tengo alrededor, ya son demasiadas personas que me lo han dicho con la coletilla "nunca me había pasado nada igual con nadie". Tengo la piel muy fina y supongo que no estoy para según que cosas...

Probablemente desapareceré o haré algo drástico, no sé... nunca pensé que estaría en una situación como la que estoy ni que me hicieran lo que probablemente yo he dejado que me hicieran.

Espera a la primavera, B... dijo...

Cova, esto no va a ser eterno... tengo que sacarme de encima todo eso de la nostalgia y sobre todo, dejar de morir para empezar a vivir.

Espera a la primavera, B... dijo...

Hay infinidad de blogs escondidos en los que se escribe tan bien... y yo... ¿qué le voy a hacer? siempre me quedo en esa fase entre bastante bueno como para ser del todo mediocre y demasiado malo para pasar al nivel de escritura mínimo.

¿Qué te voy a contar yo? Tú sabes lo que dicen de mi blog algunos "profesionales".

Daltvila dijo...

Con todos mis respetos para el Director de l´escola d´escriptura....
¡Paparruchas!
No te dejes intimidar, ser el Director bla,bla,bla... no te hace un ser Superior.
Te lo habrán dicho un millón de veces, pero por enésima vez te recuerdo que es más fácil hacer llorar que reir y a tí se te dan genial las dos cosas (te lo digo por experiencia).

Fdo. Daltvila metida a crítica literaria (¿intrusismo?).

P.D. Me sumo totalmente a lo que dice Amber.
P.D. II.- Por cierto, ¿alguien me puede aclarar si es que está muy mal visto enrollarse en los comentarios? Gracias de antemano.

Maeve dijo...

Hola,
te iba a contestar algo así como que muy bien, que hagas lo que te siente bien. Luego he leído tu respuesta a uno de los comentarios y voy a volver a repetir por enésima vez la historia de John Irving y a contarte mi experiencia con un blog que tuve, en otra lejana vida, con estos mimbres que tú te traes. Así que prepárese para un tocho, caballero :)

John Irving era un pésimo luchador de lucha libre que, sin embargo, disfrutaba tanto de las competiciones como conocía sus capacidades. Esto no era óbice, sin embargo, para que ( puntualmente) le embargara el desánimo al compararse con sus compañeros -más capacitados, más dotados, más talentosos, de equipo- y se planteara el seguir haciendo eso que tanto le gustaba. Su entrenador fue muy claro con él: Sí, no eres el rey del tapiz, pero es que rey sólo hay uno. ¿ Vas a dejarlo sólo porque no eres lo bastante inteligente como para dejar aplastarte a ti mismo comparándote con aquellos que están naturalmente fuera de tu alcance? Si eres mediocre, se valiente por lo menos y se el mejor mediocre posible.

Además de un excelente escritor, nadie lo duda, John Irving es un dedicado y gran luchador de lucha libre. No lo dejó.

Segunda parte:
Tuve un blog como este, no tan bueno, pero si parecido. El blog fue fundamental para mi. En muchos sentidos. También fue un lastre para mi salud mental, algo de lo que no me percaté hasta ( muchos) meses después de haberlo cerrado. Me alegró tanto darme cuenta de ambas cosas que, cuando el servidor que lo alojaba ( ya cerrado) me advirtió que lo migrara a otra plataforma o lo perdería dejé que se perdiera. Con todos los textos que en el había: Media vida. O así me lo pareció. Tal y como ocurre en la vida real cuando cicatrizas.

Gran parte del problema del blog venía ( ahora que no me lee ningún comentarista, ejem, hola hécuba) de la gente que tanto me había ayudado con sus comentarios y ánimos durante el tiempo que el blog estuvo abierto. Ellos me ayudaban mucho, pero no me dejaban, involuntariamente, crecer y apartarme. Algunos de ellos volvieron a comentarme en mi nuevo blog. Otros no. No me arrepiento de haberlo cerrado, aunque echo de menos las palabras de algunos.

¿ Te sirve esto una mierda para algo? No sé.
Mi blog está abierto para ti, si quieres publicar algo en lo que te decides a volver o no. Me uno a hécuba: Del todo, no desaparezcas.