miércoles, 3 de marzo de 2010

el corazón que mueve los pedales de la bicicleta



Puedes contar conmigo, todo lo que digo es lo que hago, a veces soy un tonto que no sabe mentirte. A veces sólo soy un tonto que no sabe hacer las cosas, al que le viene demasiado grande comprenderte a cada instante, porque a veces la felicidad me distrae cuando estoy contigo, sí, me meto en una especie de burbuja espacio-tiempo de la que sólo puedo sacar una mano para tocarte.

Hoy leía que el eje de la tierra se ha desplazado 8 cm. por el terremoto de Chile y que, por esa razón, el día es algo más corto. Se me escapa tal razonamiento. A mí los días se me hacen cortos cuando estoy contigo y me pregunto si esta epidemia de terremotos no lo estaré provocando yo con mis ganas de estar contigo.

Podrías pensar que claro, que ahora lo digo así, para que tú lo sepas, para que no te vayas, para que no te montes en tu bicicleta y te vayas calle abajo, pero ¿sabes? no cuentas con eso de que soy tant tonto que no sé mentirte, y todo lo que digo es lo que hago y ¿sabes? no quiero hacerlo pero si hace falta te pincho las ruedas de la bicicleta. Seamos lo que seamos no soportaría el candado atado a la farola.

Iba a poner una foto de un gatito mojado, que dicen que es lo que más pena da, pero no he llegado a esos extremos (los he sobrepasado) y la foto es lo de menos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No estoy segura de que me ha gustado más, si el título del post o la frase que dice que a las relaciones no se les debe poner candados... Ah, ya sé, lo mejor de todo es encontrarte animado y entusiasta (está claro que sabes arreglártelas para salir adelante. Eso es genial).
Besos

Espera a la primavera, B... dijo...

Esa foto te da muy aire a Esmeralda en el jorobado de Notre Dame