lunes, 13 de octubre de 2014

El porqué del riesgo


Debes tener miedo. El miedo es lo único seguro que vas a tener, el único que no te va a abandonar cuando estés desesperado, el único que estará ahí siempre que las cosas se pongan feas, estará ahí para protegerte, para ponerte alerta, para que no vayas más allá. Sin miedo estarías muerto y ya sabes, debes tenerle miedo, sobre todo, a la muerte.

El miedo te condicionará, dejarás de hacer cosas necesarias para sentir que eres tú mismo y te acostumbrarás a ello. Enseñarás a los demás a tener miedo para protegerles, para que huyan y se escondan, para que acepten aquello que es tan grande que ni tú ni ellos podréis comprender, y como no podéis comprenderlo deberéis creer a aquellos que dicen hacerlo.

Con el tiempo aprenderás a resignarte, a pagar y callar, a votar y aceptar, a tener pequeñas frustraciones que tapen la gran frustración. Y las mentiras. Aprenderás a creerlas y aprenderás a mentirte, y sobre todo, evitarás emocionarte hasta olvidar que todo, sobre todo mentirte, lo haces por miedo, un miedo que nunca has sentido de verdad porque porque sólo se puede sentir miedo a morir si estás vivo.

Y ya no lo estás.

Porque si tienes miedo a vivir por miedo a morir es que ya estás muerto.

Pero ya que estás muerto ¿a qué tenerle miedo?

"Si no construyes tus sueños alguien te contratará para que construyas los suyos" y lo hará porque eres débil, y eres débil porque no eres quien estás destinado a ser. Ser débil no es no tener fuerzas, es abandonarse, es resignarse, es aceptar que lo que dicen los demás es lo correcto y tú estás equivocado acerca de ti mismo. Sólo tú vas a vivir tu vida, sólo tú decides lo que quieres ser y lo que no quieres ser.

Y claro, está el miedo. Y claro, estás tú tan débil. Y están ellos, que saben lo que es mejor para ti.

Pero entonces, un día, alguien te hace una pregunta y te obliga a mirarte en el espejo. Y te das cuenta de que el miedo es algo opcional.



Puede que hayas arriesgado demasiado y hayas pagado las consecuencias. O puede que lo que hayas hecho hasta ahora se quedara en un amago de riesgo de verdad, que lo que tomabas como audacia no sea más que un simulacro de lo que deberías haber apostado.

O quizá vivas en el miedo y desees, por encima de todas las cosas, encontrar un lugar en el que refugiarte de él y que sigas mintiéndote cuando te dices que ya no te mientes.

Y puede que le miedo no sea opcional, que el miedo sea tan humano como tú mismo, que esté ahí para proteger a la especie, a tu familia, a tus hijos...

... pero sabes que no estábamos hablando de ese miedo.

Lo sabes y sin embargo te aferraste a él.

Porque aprendiste que debes tener miedo, que cuando estés en peligro o confuso siempre podrás recurrir a cualquier forma de miedo.

Y ellos los saben.

En eso consiste ser esclavo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La angustia de vivir. Hoy no he dejado de sentirla.
Marnie J.