miércoles, 3 de mayo de 2023

El Universo según S

 

S me llama. No tengo muy claro el porqué. Hace tiempo que pensaba en llamarla, pero ahora no soy capaz de buscar otra voz que no sea la que suena dentro de mí y que me hace seguir pensando en C. El caso es que quedamos mañana para comer cerca de donde ella trabaja. S tiene un puesto importante, pero por alguna razón que no entiendo a veces me llama y comemos juntos. Hay algo que no tiene nombre y que me atrae cuando me llama. 

Es como morder un anzuelo. Es saber que no voy a sacar nada bueno y aún así perder todo un día para no saber cuándo voy a recuperarlo. Creo que es a la persona que más respeto en todo este jodido mundo y al mismo tiempo la que creo que podría llegar más lejos si se lo propusiera y eso me hace respetarla un poco menos.

En otro orden de cosas, queda poco más de un mes para que la petita princesa dé su conferencia sobre cuántica y lenguaje en Barcelona

Ella habrá acabado su novela. Me pregunto si yo alguna vez empezaré la mía. Se ha cambiado el apellido. No sé si será más literario. Me gusta creer que las cosas le van bien y que ya tiene escrita su novela. 

A veces soy muy simple

Demasiado





2 comentarios:

Jo dijo...

cuando leo cosas tuyas asi de el estilo en no darse demasiada importancia recuerdo a Klimt que consideraba de sí mismo no parecer nada interesante. y que nos haya limitado siquiera a ver un autorretrato suyo.

el y yo y tu pensamos de nosotros mismos eso y lo que en realidad sucede es que si somos interesantes y seguramente mucho más que otros que seguramente tienen el toque de ponerse frente a cámara o frente a público.
quizá es el estilo de ser de cada uno.

no sé.
¿no t has dado cuenta que fragmentos de este blog son tu novela?

Espera a la primavera, B... dijo...

Empecé el blog porque era la única forma en la que podía escribir. Escribir es un oficio, es un ejercicio de serenar tormentas, de domar al monstruo y al mismo tiempo de poder darle una estructura.

No sé hacerlo. Me gustaría poder hacerlo, pero no soy capaz de hacer entender algo que crea que puedo transmitir.

Creo que a ti también te debe pasar. Dentro del discurso interior todo tiene sentido, pero luego, la realidad no es tan sencilla, la página en blanco quiere algo coherente que contener para poder explicarlo y para eso intuyo que hay que tener algo sólido bajo la piel, algo que no se deshaga a menudo.

Gracias por escribirme.

No te imaginas cuánto lo agradezco.