domingo, 16 de julio de 2017

Horizontes


Creo que ya es oficial, que es algo así como estar frente a una puerta abierta que siempre estuvo cerrada. Dice un documento que ya somos proveedores del grupo de Naciones Unidas. Hace tanto tiempo que empecé esto que no sé si he sentido alegría o alivio.

En la misma semana cerramos proyecto con dos de las empresas más grandes de Europa.

Otras dos están interesadas.

Cerramos proyectos con universidades y con centros tecnológicos.

Todos en base a las patentes que he desarrollado o he licenciado.

Vértigo. Siento vértigo.

Me siento un impostor. Yo, que no soy nada, que no aparento nada, que vivo con dos gatos, que me gusta no hacer nada, que leo cualquier cosa menos ciencia o negocios. Creo que he llegado hasta aquí arrastrado por la inconsciencia. Y de algún modo siento que he vivido una vida que no era la que me correspondía...

El caso es que estoy en esa fase de casi meta. Ese tiempo en el que te acercas a tu objetivo y ves el final y es bajada y te lleva la inercia. Y bueno, es ese momento en el que sabes que sueles sabotearte, en el que siempre pasa algo, en el que dudas de si realmente vale la pena todo.

Y el miedo a qué pasará luego.

Y el miedo a que no sea suficiente y tengas que seguir peleando mucho más tiempo.

A veces somos nuestros peores enemigos. Me gustaría saber si las cosas serán los suficientemente sólidas aunque esta vez lo hice mucho mejor, compartí riesgos, hice buenas alianzas.

Supongo que no todo está atado, no sé si alguna vez algo lo está cuando creemos que lo está.

Han sido muchos años a contracorriente . Todavía mi padre me dice que no hago las cosas bien. Casi nadie dice que se hacen las cosas bien. Todo el mundo tiene un pero.

Estos últimos años, en cambio, he empezado a trabajar con gente muy positiva.

El verdadero talento no está en las capacidades, sino en motivar a otros a que las desarrollen y las apliquen.

Hay un mundo ahí fuera en el que se escuchan más las voces que dicen que no lo haces bien.

Hace falta mucha fe en uno mismo para tirar adelante.

Creerse más que otros.

Convencer a otros de lo imposible.

Y hacerlo.

Supongo que para alguien con tantas dudas como yo, no ha sido fácil.



Hace unos meses estuve en esa cala con la que empieza el vídeo...

1 comentario:

Anónimo dijo...

quando te leio, me sinto menos só...há alguém que comparte comigo...me sinto igual....soy eos