miércoles, 28 de septiembre de 2016

Al final



Imagino que al final todo tenía que ver con esto. Con dar por bueno o no lo vivido, firmar en la línea de puntos y girar de nuevo la rueda de las existencias.

Haber aprovechado la oportunidad tratando de cambiar el mundo aunque sea sólo un poco.

Haber contribuido algo a la felicidad de otros, haber conocido el amor y la pérdida, querer ser alguien más y dar lo que fuera no ser uno de tantos.

Dar y recibir.

Ser quien estabas destinado a ser y que parezca que haya sido una elección.

Nunca es una elección.

1 comentario:

José A. García dijo...

Nunca se elije, se hace lo que se puede.

La mayoría de las veces no es mucho que digamos...

Saludos,

J.