lunes, 29 de septiembre de 2008

A veces sueño contigo


A veces me caigo y otras me levanto, cuando estoy en el suelo aprovecho para mirarte debajo de la falda, cuando me levanto te miro el escote, me gusta cuando me acaricias a fuego lento y me derriten tus dedos, eres lo mejor que aún me queda por conocer y lo mejor conocido.
Eres ese sueño del que siempre despierto y en el que me descuelgo por la ventana de tu casa una vez nos hemos visto boca a boca, cuerpo a cuerpo, ombligo contra ombligo. Desearte es lo mejor y lo peor que me ha pasado nunca... y sin embargo, no te consigo. Siempre te escapas, te veo alejarte, te das la vuelta y me dices adiós con la mano y luego echas a correr, probablemente, a los brazos de otro. Y yo me vuelvo a casa, dándole patadas a las piedras, diciéndole que no a todas las otras mujeres, sabiendo que si me perdieras acabarías dándote cuenta que no podemos vivir el uno sin el otro, ni el otro sin su todo.

Y no te imaginas lo cerca que me quedo de tus labios cuando al despedirnos nos damos dos besos, ni lo lejos que vas cuando te separas un metro. Ni lo mucho que deseo que llames al interfono una noche de éstas y me digas: me he dado cuenta que de muy de vez en cuando (es decir, casi siempre) te necesito.

1 comentario:

Blau dijo...

Yo te sueño las 24 horas del día..de todos estos años, que me has tenido tan confundida,donde un día parecía adivinarse un rayo de luz y otro se desvanecía.
Sabes, para que alguien se escape de un lugar debería saber antes que esta recluido en él.
Donde habría sido más fácil superar ese pánico a lo descnocido que me envuelve,si tengo de tus labios tu permiso para amarte.