domingo, 21 de noviembre de 2021

1800 Te echo de menos

Bueno, ya sabes, las cosas por aquí se complican. No me imaginaba tener que cargar con todo esto. En parte ahora sé qué tenías que llevar tú a cuestas. Nadie está libre de nada, pero esto a veces me supera. 

Daría todo que fuera para que estuvieras aquí y participar de todo esto. 

En febrero iré a Estados Unidos y empezaré algo allí. Me acuerdo de todo lo que planeamos la campaña de Kickstarter en 2018, cuando estuve en Las Vegas hace dos años, en lo que pudimos hacer y no supimos y yo continuo sin saber cómo.

Todo tiene pinta de que irá bien, aunque no para mí. Yo tenía un camino de vida que desvié para hacer otra cosa que tiene sentido, pero no sé si es mi camino. Bueno, supongo que al final el camino es el que tratamos de recorrer con mayor o menor suerte.



domingo, 7 de noviembre de 2021

Señales



 ¿Se puede se escritor después de los cincuenta sin haber estado relacionado con el mundo editorial? Te diría que no, que es imposible y como mucho podría escribir algo y ya está, que la forma de escribir se pierde como se pierde la memoria, la agilidad, la firmeza de la piel y el pelo... que en realidad uno es más un saco de historias que no tienen nada que contar; que el alma se destensa como una cuerda de un instrumento y de vieja, si se quiere volver a tensar, se acabará rompiendo.

Rotos. No lo sabemos aún pero estamos rotos por dentro casi tanto como por fuera, que no sé qué parte de nuestro ADN se deshilacha como las puntas de los cordones de los zapatos, que por eso nos deshacemos en copias peores de nosotros mismos. Somos personajes rotos de historias que se también se rompen en cada persona que abandona nuestro mundo para no volver.

Pronto yo tampoco estaré. No sé si se acabará el blog mucho antes.

En cualquier caso creo que mantuve la llama encendida aunque fuese la de una vela en la ventana. Quiero creer que mientras siga ardiendo aún quedará un escritor en mí, como un huevo gigante de dinosaurio que nunca llegó a abrirse y se quedó ahí, lo que hubiera podido haber sido, perdido para siempre. Algo vivo y algo muerto al mismo tiempo. 

Me gustó leerte aunque nunca te conociera

miércoles, 3 de noviembre de 2021

Cosas



Todo esto de escribirte en el blog me suena a frivolidad. Las cosas que nunca te dije, las cosas que no te diré, aquí, que es el único lugar en el que escribo. La única página en blanco que sé llenar como prólogo a un vídeo.

Supongo que cada día se hace más grande la grieta y no sé hasta dónde va a acabar creciendo. 

Ahora todo es un hubiera dicho, hubiera cambiado esto por lo otro, pero en realidad no sirve de nada seguir por ese camino. Si todo se acaba, quizá debería acabar aquí, pero creo que en realidad escribirte es otra forma de escribirme a mí mismo tratando de hacerlo a la persona que mejor me conocía. Y eso no me gusta, no debería hacer eso. Hay excusas que no tienen excusa.

Te diré que hoy hemos salido en las noticias, los del pueblo. Nunca salimos en la tele por nada bueno. Esta vez ha sido algo que pone los pelos de punta. Parece mentira que haya personas así y que vivan entre nosotros.

Pocas veces creo que algo merezca la pena de muerte, pero esto sí. Dicen que hay un 1% de la población que es psicópata y que en las zonas de guerra acaban siendo un porcentaje más alto. No sé que les puede haber pasado por la cabeza a alguien así. Hace años, cuando hacía A.T. me comentaron cómo detectar a un psicópata. No es difícil. Reconozco que a veces lo hago. En las entrevistas de trabajo, por ejemplo. 

A veces, cuando imagino la novela y escribo capítulos en mi imaginación, busco el manual de estructuras de personalidad para estereotipar a los personajes. Hay algunos que no pueden ser redondos. Nadie puede meterse en el papel de alguien que tiene una estructura límite. Ya lo intentaron en American Psycho, no sé. Creo que no podemos cambiar quienes somos.

Me hubiese gustado haber escrito la novela para que la hubieras leído. No sé si me atrevo a prometerte escribirla. Tú siempre me decías que yo era de letras, que no sabías qué hacía estudiando ingeniería; y tenías razón. Tomamos decisiones y seguimos con ellas hasta que nos llevan a un callejón sin salida. No sé si acaba siendo demasiado tarde.

A veces pienso que para ti lo fue y yo debería aprender de ello.

Últimamente pienso mucho en eso.

En que tu vida debería haber sido otra. Y me pregunto si yo estoy a tiempo de poder cambiar la mía.