miércoles, 29 de septiembre de 2021

El último sueño


 

No sé si tiene sentido que siga escribiendo aquí. Entré para que esto de escribir me ayudara a encontrar mi historia. Reconozco que años después escribo mucho peor que antes, me he ido perdiendo poco a poco en un murmullo constante con el que no se llega a ninguna parte. Estos párrafos se ha ido convirtiendo en un pasatiempo cada vez más aburrido. Ya no me nacen las grandes historias que me crecían hace trece años. ¿Qué ha pasado? La inercia, supongo. La vida, creo.

Hoy ha sido otro día más. Me gustaría creer que algún día todo cambiará para mejor, pero creo que no va a ser así. La hermandad de la piedra seguirán llevando todo esto hasta el extremo vital para el que han nacido y para lo que se reúnen. 

Pero tengo la sensación de que hoy, ese otro día más, es en realidad un día menos. Hoy hay un antes y un después en muchas cosas que creía inamovibles. Es uno de esos días que cambian destinos y abren puertas. Sé que es un día corriente, pero también sé que hoy es el primer día hacia el primer día de algo que tiene más o menos sentido.

La vida está ahí fuera. Más allá de lo que vemos con los ojos.

No es aquello de lo que lo esencial es invisible.

Es que todo es en realidad el todo, lo único.

Hoy he comprendido que se atrae lo que se es. Y supongo que dejar este blog es dejar un poco de ser ese que era.

La muerte de mi hermana ha dado otro significado a la muerte. Es algo inmenso y absoluto y es lo peor que me ha pasado nunca. Me ha destruido del todo sin que nadie lo note. Antes de que ella muriese yo ya iba mal, como alguien que se tambalea y le dan un empujón brutal y cae irremediablemente contra el suelo.

Convivir con mi madre en este trance se me hace insoportable y sólo el trabajo me distrae.

Otra vez la inercia.

Daría lo que fuera para volver a ser el hombre que era antes...

... que todo fuera como antes.

Ahora sólo queda empezar de nuevo.



viernes, 24 de septiembre de 2021

Ya no, ya nunca


 

No creo que exista nada que se parezca a algo así. Los días pasan como si fueran irreales, como si no fueran con uno. Hay un salto entre la realidad y lo que uno vive. No sabría muy bien cómo explicarlo. Como si un huevo se hubiera roto, se vaciara y luego se recompusiera hasta tal punto que creyeras que no ha pasado nada y la única prueba de que sí ha ocurrido es la yema y la clara esparcida fuera... A veces parece que nada pasa, pero en realidad sí ha pasado y es imposible volver a lo de antes.

Ya nada es lo de antes y nunca volverá a serlo, pero no como todo eso de que el tiempo es lineal y vamos madurando y vamos quemando etapas a medida que crecemos. Es otra cosa, es algo que no tiene nada que ver con nada. Es la constatación de que hay dos verdades igualmente válidas pero distintas, como si uno se diera cuenta de que el amor es en realidad otra forma de odio, pero sigue siendo amor y dulce y bueno, y todo lo que conoces de ello, pero que si lo partes por la mitad y miras su interior, no.






lunes, 6 de septiembre de 2021

Si me preguntaras qué es lo que importa

 


Si me preguntaras qué es lo que importa te diría que ya nada; que antes quizá era que te quedaras y volvieras a ser quien eras.

Ya no podré decírtelo.

Lo difícil de todo esto es que me voy a quedar con lo que tú no eras. No deberían dejar ver a los cuerpos inertes. No somos eso. Somos otra cosa que flota y vive para siempre, pero que no se ve y que no se escucha.

Siempre me quedaré con la sensación de que no hice suficiente, que la última vez que me miraste y pudiste mantener la mirada me dijiste algo que sólo tú sabías y que ya nadie más sabrá. Sospecho que sospechabas lo que iba a pasar y me dejaste el encargo de que cuidara de tus hijos.

Y lo haré. Me he dado cuenta de que no sé hacer otra cosa. No renuncio a nada a cambio de ello como sé que tú tampoco lo hiciste. Seguiré abriendo puertas hasta encontrar la buena, la que te lleva a alguna parte, la que guarda el premio grande. 

Seremos felices porque tú lo querrías así.

Seremos lo que tú querrías que fuéramos un día. 

Meritxell acabará la carrera y conseguirá un buen trabajo.

Gerard acabará por ser alguien en algún lugar en el que no exista el miedo.

Te lo prometo y pienso cumplirlo como lo hicimos al llevarte al lugar donde te fundiste con el infinito de nuevo y que tú habías dicho que querías que fuera tu punto final.

Conseguiste irte, no sé si en paz; la coherencia no se te daba demasiado bien, o al menos eso creía. Al final nos sorprendiste a todos. Estoy seguro que no fue tu intención, pero lo hiciste.

Creo que hoy lo voy a dejar aquí. Sé que a partir de ahora voy a escribirte casi todo lo que escriba. Tú decías que yo era de letras y era verdad. Para mí la ciencia es una montaña que escalar y no un sendero por el que disfrutar del bosque mientras se llega a alguna parte. Diría que en eso radica el secreto de casi todo. Creo que tú lo sabías.

Sabías demasiado para seguir entre nosotros y te fuiste antes de tiempo.

Hasta luego, hermanita mía. 

Hasta siempre. Siempre.