lunes, 27 de abril de 2020

El eterno retorno

Nada que contar.

No creo que lea esta entrada otro día. Mi día a día ha sido una concatenación de días de trabajo sin descanso. Se me ocurrió hacer respiradores y movilicé a más de cincuenta personas. Luego, no nos homologaron los equipos, pero los seguimos entregando igualmente para uso compasivo.

Hablamos con el colegio de médicos y nos dieron las pautas para entregarlos en residencias y hospitales. A día de hoy hemos entregado cincuenta y seis y esta semana entregaremos otros vientiuno.

Ha sido una ilusión ,y una desilusión, y una responsabilidad y una decepción. En cuanto levantaron el confinamiento desaparecieron todos los voluntarios. Así que he sido solidario forzoso durante casi tres semanas, no sé qué pasa, siempre me meto en líos. Este fin de semana, en una serie de televisión, el protagonista dijo algo así como "no hay una buena acción sin su castigo". Sonreí. Es cierto.

Pero sigo haciendo cosas, no me resigno a casi nada. Cuando empiezo a estar demasiado cansado siempre me chuto algo de optimismo. Ahora hay cuatro empresas distintas interesadas en mis tecnologías. Como siempre. Esta vez podría ir en serio, demasiado en serio. Y eso me asusta en cierto modo, al mismo tiempo estoy convencido de que esta vez sí.

No he vuelto a saber nada de ella. Me gustaría escribirle, pero no lo sé. Creo que debo cerrar el capítulo que quedó colgado hace diez años.

Las cosas son como son. Ahora que había alcanzado un punto de equilibrio, de nuevo, plutón se cruza en mi vida. No sé.

Me gustaría creer que existe algo así como un "no destino", algo que nunca nos sucederá por mucho que lo busquemos en contraposición a ese destino que nos alcanzará aunque hagamos todo lo posible por evitarlo.




Moby, aún tengo el CD 18, en el coche... no recuerdo si esta canción está en él, porque me suelo poner a Moby en el ordenador muchas veces.

Creo que es de aquella época.

4 comentarios:

g dijo...

Sea plutón, marte o venus, siempre habrá algo que se cruce en tus derroteros, con generosidad o sin ella, con trabajo duro o mucho peor, quizás sea tu momento, qué momento, el que sea, el de tu destino o el del sin sentido. A qué esperas?

Genética Inexacta dijo...

Te vi, con tus equipos salvavidas, porque eso es lo que son , la homologación es una pegatina de arcoíris que sirve para comerciar, pero lo que tú has hecho T. eso es de grandes, por dentro y por fuera. Y hace que te quiera un poquito más.
Dice Gardel que 20 años no es nada ... así que, qué son 10 después de todo? Deja que fluya y si entras en la órbita de Plutón , pues oye! A orbitar, que la vida son dos dias y medio nos lo hemos pasado en cuarentena .
Un abrazo lleno de flores se sakura

Espera a la primavera, B... dijo...



Nunca sé a qué he estado esperando. Quizá estaba esperando esto...

Gracias g, te echaba de menos.

Espera a la primavera, B... dijo...

Genética, el tiempo es cruelmente cíclico. A veces los ciclos son largos y otros son tan cortos que apenas los percibimos.
Estamos de paso... me gusta aquella frase "dicen las estrellas que los fugaces somos nosotros"
y aquella "si vives la vida como si fuera el último, un día tendrás razón".

¿Qué otra cosa podemos hacer si no tratar de dar sentido a lo que no lo tiene?

Inventamos la literatura para explicar algo inexplicable, para contrarrestar el vértigo, el "y ahora qué" que nos persigue.

Me encantan las flores de sakura porque nacen y crecen en oriente, que es lo mismo que decir hacia el este.

Un beso muy grande