martes, 22 de noviembre de 2011

A diez días del fin del mundo


Hoy me ha dolido el día por todo el cuerpo. El sol era azul llama de gas natural y tuve la mala idea de releer lo que había escrito ayer por la noche.

He hablado diez o doce palabras, me he escondido todo lo que he podido de todo el mundo, he caminado bajo los balcones y por calles estrechas. Me he gastado poco. He intentado hacer un maki de salmón y no me ha salido. Ulises ha comido salmón que ha quedado pero Penélope no le ha hecho ni caso.

He querido hacer cosas, he comprado unos equipos en Alemania y casi hago un cliente. Quizá haya hablado más de doce palabras, quizá fueron doce frases. He pensado en ti y sé que has leído la entrada de ayer y que, probablemente has pensado que siempre escribo lo mismo. Hoy sí me ha importado que pensaras eso.

Ha hecho frío.

Me gusta y no me gusta el frío.

No tengo ganas de escribir, tengo ganas de que ya sea mañana o el viernes. No sé dónde estás.

No puedo vivir sin el blog ni quiero vivir con él. Me pregunto si cuando leas esto sabrás que es para ti. Y por alguna razón sé que sí lo sabrás pero no harás ni dirás nada. No sabrás qué decir.

Y no te imaginas lo que necesito oírte la boca en la pantalla.

6 comentarios:

Nada más importa dijo...

"No puedo vivir sin el blog ni quiero vivir con él"

Me idenifico demasiado con esa frase!
Te entiendo mucho, y es por eso que siempre te leo.

No creo que haya necesidad de cuestionarse si el destinatario/a de nuestros escritos nos lee, o mira de reojo, si siente que es suyo todo lo que expresamos o definitivamente decide correrse a un lado.
Lo que importa somos nosotros, quienes sentimos, vivimos en estos espacios y quienes escribimos.

Siempre, me encanta leerte.
Tenes algo muy especial que me trasnmitís todo el tiempo.

Un beso.

hécuba dijo...

Pues yo no sé quién es la persona a la que quieres escuchar desde tu pantalla, pero sí sé que a falta de pan buenas son tortas (o algo así) y yo soy la torta que aparece por si no aparece el pan.

El otro día vi el final de American Beauty haciendo zapping, me paré a verlo, pasé del zapping, porque me gusta mucho ese final y siempre me recuerda a ti. Y es que, a pesar de todo, hay tanta belleza en el mundo...

Un beso, toni.

Espera a la primavera, B... dijo...

No sé cuál de tus dos blogs seguir, también me identifico con lo que escribes, aunque a mí nadie me agarre la mano inesperadamente mientras duerme, me sentí muy cerca, casi logré encontrar un sucedáneo del tacto.

¿Con qué blog de los dos que escribes te identificas más? Bueno, no sé si juego limpio. Creo que sé qué blog voy a seguir pero me gustaría que me dijeras cuál, si no fueras tú, seguirías de los dos.

Gracias por compartir, por escribir, por ser esa otra orilla.

Besos

Toni

Espera a la primavera, B... dijo...

No te imaginas lo mucho que te echo de menos, y lo digo porque yo tampoco me imaginaba que lo echara tanto de menos.

Me encanta el final de American Beauty, me gusta porque dice que estamos hechos de momentos, de las cosas que hemos vivido, de los lugares, las personas, las pequeñas grandes sensaciones que crees que olvidas pero las llevas siempre contigo. A mí el final de American Beauty también me recuerda a ti, porque es una lista, aquello que nunca debemos olvidar, cuando dice "... y Jenny" los amores de verdad, el amor a los hijos, el amor de los padres...

... me hubiera gustado vivir más cerca de ti para tomarme una de esas cervezas contigo. Creo que hubiéramos sido buenos amigos. Creo, que de alguna forma, somos buenos amigos.

Cuídate mucho. Y no tengas miedo.

Un beso

Toni

Nada más importa dijo...

Gracias por tus palabras, ya que, realmente, creí que no habías leído nada de lo que hago.
Y con respecto a tu pregunta, te cuento, el blog que tengo de color negro lo tengo hace más o menos dos años, y se que jamás podría dejarlo, ni borrarlo. Tiene mucho de mí, muchísimo. Han pasado cientos de cosas que plasmé en el y es muy importante en mi vida. Lo amo realmente.
Al otro, al blanco, lo cree hace un año. Sentí que , como dije en mi primera entrada, "necesitaba encontrar claridad en algún lado", y por eso nació ese espacio.
Actualmente uso los dos, solo que, como trato de salir un poco de la oscuridad y tristeza de mi pasado, a veces, uso más el blanco. Aunque, creo, que siento pasión por el otro.
Me gustaría que estes en ambos, sinceramente, no por número de seguidores, (no soy así), pero me gustaría que me conozcas verdaderamente y para eso hay que leer los dos.
Son dos, es cierto, pero escribe la misma persona. Como lo fue siempre y la cual jamás cambiaría.

Besos!

Espera a la primavera, B... dijo...

Curioso. Este blog nació negro, un día lo cambié a blanco, luego volví al negro y así...

Un día alguien me dijo que desde su iphone le resultaba muy molesto leer sobre fondo negro. Lo cambié definitivamente a blanco.

Después de lo que me has dicho, probablemente seguiré los dos, pero añadiré el blanco.

Me siento identificado con lo que escribes. Y a veces duele un poco, porque los espejos son siempre una ventana a uno mismo... no se puede vivir con una eterna tristeza.

Te mando un fuerte abrazo