jueves, 26 de agosto de 2010

Ya se sabe que nunca se sabe, que el calor aprieta, que dios no ahoga; que el árbol no deja ver el bosque y viceversa, que sí, ¿qué pasa? yo quiero los ciento y un pájaros volando ¿qué voy a hacer yo con un pájaro en la mano? ¿hacernos amigos?

Yo te quiero a ti, y tú sin saberlo, que no te hace sufrir quien sí te quiere, que no, que quien te quiere va a buscarte a la puerta del trabajo y te lleva regaliz en una bolsa y tú... tú... el mar está lleno de peces (y naufragios) y sueños soñados despierto, y luces y sombras, y yo tan de aquí y del otro lado, yo... siempre yo... a ver cuando de deshago de mí y corro a buscarte.

Y luciérnagas y... ¿qué clase de árboles son los de tu calle? y no sé si me entiendes, a veces creo que sí y otras... otras te vas y me dejas vacío, como un vaso vacío, como una cuchara vacía, un hombre de fibra hueca al viento como una cometa.

3 comentarios:

LaCuarent dijo...

Dicen que los refranes son sabiduría popular pero yo me pregunto ¿donde estaba ese populo que yo no lo entiendo la mayoría de las veces?
Un beso y buenas noches

Genética Inexacta dijo...

Sweet sweet sweet, como una nube de lluvia que arrastra melancolía.

Muaaaaaaaack

la chica de las biscotelas dijo...

el mar tambien está lleno de botellas con mensajes...